Nueva edición de un libro de 1909 del entonces adolescente poeta tucumano Manuel Lizondo Borda (1899-1961), quien con el tiempo forjaría una larga trayectoria en el campo de la historiografía local. La edición de 1909 –realizada por el Colegio Nacional de Tucumán, donde estudiaba el autor–, se cuenta entre los primeros libros de poesía publicados en la provincia. En rigor de verdad, se trataba más bien de folletos que por lo general incluían, como éste, poemas premiados en los llamados Juegos Florales. El libro contiene un solo poema extenso dividido en secciones que cantan al agua en sus diversas formas: mares, lagos, ríos, nieve, hielos. Puede reconocerse cierto influjo modernista en los textos. De hecho, el libro está dedicado al poeta de origen boliviano Ricardo Jaimes Freyre, figura destacada del modernismo literario que vivió durante dos décadas en Tucumán, donde se convirtió en maestro de los jóvenes con inquietudes poéticas.