| dc.review.review | La revista VillaBom (2005-2011) comienza como un fruto de un proyecto cultural de la escuela Juan XXIII en el barrio conocido como “La Bombilla”, dirigido por Silvia Camuña (Premio Nacional Viva Lectura 2009). El proyecto se focaliza en la lectura y la escritura como formas de modificar el destino social y como medios para elaborar la propia subjetividad y acceder al conocimiento. La intención es que los jóvenes puedan construir su identidad fuera del determinismo social. Su objetivo es “dar voz y protagonismo a los chicos y adolescentes del barrio, cambiando la manera de mirar de muchos que solo giraban la cabeza hacia aquí para criticar, juzgar, condenar.” (Número 8)
Hasta el número 5, VillaBom era “la revista estudiantil de la escuela Juan XXIII”. El número 6 anuncia que “ahora es la revista del barrio... porque ahora es de TODOS”. La revista incluye producciones literarias de los chicos de la escuela y del barrio, como poemas, cuentos, coplas, acrósticos, adivinanzas, entre otros. Además, se incorporan rescrituras de formatos tradicionales de la revista con un giro creativo y humorístico, como avisos clasificados, cartas y publicidades, como la sección “Venta de poesía” en el número 5. También hay espacios de comunicación sobre los intereses de los chicos, como sus pasatiempos, letras de canciones y sus gustos, lo que muestra el lugar protagónico de los niños y adolescentes en la revista. Asimismo, todos los números incluyen una editorial. En el caso de los cinco primeros números, también se incluyen proyectos vinculados con otras áreas, como comunicación de días patrios, campañas de prevención de enfermedades e información sobre diferentes temas.
Los destinatarios de la revista son los “niños, adolescentes y adultos de nuestro barrio y de los barrios vecinos” (número 6). La revista VillaBom tiene el propósito de resistir en un contexto adverso, como se menciona en el número 9, buscan que los chicos se puedan presentar “con sus cabezas en alto ante un sistema vil que los condena desde el vientre. Venimos a brindar la mejor herramienta: la palabra.” | |
